Los ríos que abastecen el área metropolitana de Barcelona son mediterráneos, de caudal escaso e insuficiente.
Por ejemplo, Barcelona tiene 26 veces menos agua disponible que París (y unas 300 veces menos que Viena).
A plena capacidad, los embalses de Cataluña tienen agua para un año. Si no llueve durante 365 días, es posible que no haya suficiente agua para todos.
Tener especial cuidado con tus hábitos diarios puede reducir drásticamente el impacto del consumo de agua.
El 92% de la población catalana se concentra en las grandes ciudades costeras. Estas zonas son precisamente donde hay menos agua disponible (40% del total).
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